La primavera en París es una época simplemente mágica. Brilla el sol, los locales se animan a salir a la calle y la ciudad aparece cubierta de bonitas flores. El tiempo es suave, con temperaturas moderadas en torno a los 5-11 grados entre marzo y mayo, aunque aún no es posible prescindir de las prendas de abrigo. Es el mejor momento para explorar los jardines secretos de la ciudad, hacer turismo al aire libre y, si aparecen las lluvias de abril, disfrutar de los muchos e impresionantes museos por los que es conocida la ciudad. Y, por supuesto, qué mejor ocasión para subirse a uno de nuestros autobuses turísticos panorámicos.
Si piensa ir a París en primavera, hemos seleccionado para usted algunas de las mejores cosas que hacer:
El Sena en primavera
En París la primavera es la mejor estación para pasear a orillas del Sena o, si lo prefiere, recorrerlo pedaleando en una bicicleta pública. Muchas especies están en floración y el entorno no podría ser más fotogénico. Con menos multitudes en este momento del año, es posible pasear sin prisas y disfrutar de las vistas. Asegúrese de detenerse en los jardines cercanos a la Catedral de Notre Dame, donde abundan las flores de un color rosa brillante: ¡tenga la cámara a mano!
Suba a la Torre Eiffel
No hay mejor momento para ver la Torre Eiffel en todo su esplendor que un día soleado de la primavera parisina. Llévese algo para disfrutar de un picnic a los pies de esta atracción icónica; un telón de fondo así para comer el sándwich no se tiene todos los días. En días despejados se puede ver hasta la cima, a diferencia de otros momentos del año en los que la niebla suele ocultar la aguja. Luego suba hasta arriba para obtener una vista panorámica de toda la ciudad.
Ruta clásica roja, parada: Tour Eiffel
Una gema oculta
Buttes-Chaumont es una de las gemas ocultas de París, y cuando mejor se puede disfrutar es en primavera. Este parque del que probablemente no haya oído hablar es un oasis urbano que proporciona un escape del ajetreo y el bullicio de la ciudad. Dé un paseo para descubrir sus cuevas y cascadas, un puente suspendido y un lago. Esté atento a la fauna silvestre: este es un paraíso para la observación de aves. Y, gracias a sus fuertes pendientes, también es la ubicación perfecta para obtener unas vistas increíbles de la ciudad. Descubra más Gemas ocultas de las que disfrutar en París en primavera.
De museo en museo
En París en primavera no es raro encontrarse con un día lluvioso. Así que llévese un paraguas pero prepare también un itinerario a cubierto por si al cielo le da por llover. Es una excelente excusa para hacerse con un pase e ir saltando de museo en museo por los muchos que ofrece la ciudad. Nosotros tenemos nuestra propia lista de Los 10 mejores museos de París para recomendarle. Empiece en el Louvre para luego ir al Palacio de Versalles, el Arco del Triunfo y, por supuesto, la Catedral de Notre Dame. Con más de 50 opciones incluidas en nuestro Pase para museos, eso será solo el comienzo. Si necesita más ideas para disfrutar de París con lluvia, consulte nuestra guía.
La primavera es una época fantástica para visitar París ya que, además de todas las razones que le hemos dado, hay menos multitudes con las que lidiar. Es un momento en el que la ciudad comienza a despojarse de su manto invernal y celebra la vida al aire libre. Y, en días soleados, puede sentarse en el piso superior de uno de nuestros autobuses turísticos panorámicos y dejar que nosotros le llevemos a ver las mejores vistas y atracciones que dan fama a París. Si necesita inspiración sobre cómo emplear el resto de su tiempo en la ciudad de las luces, consulte nuestra guía de Las 10 mejores cosas que hacer en París.