Una pastelería parisina es cosa delicada... Escaparates que hacen gala de un arco iris de macarrones dulces, eclairs y delicadas tartas individuales. No hay mejor descanso de la visita turística a la ciudad que una cata de todas estas exquisiteces a primera hora de la tarde.
La hora del té en París es un modo delicioso de pasar la tarde. Desde los grandes hoteles donde sirven delicias en bandejas de plata con varios niveles a pequeños sitios donde la porcelana china es menos lujosa pero sus pasteles son igual de buenos. Nosotros nos hemos dedicado a rastrear París en busca de los mejores lugares para tomar el té de la tarde por usted.
Estas son nuestras recomendaciones:
CARETTE PARIS
agradables vistas en sus dos bellos establecimientos. Su decoración está inspirada en el art déco con mármol rosado y molduras doradas... Un telón de fondo ideal para los protagonistas indiscutibles del espectáculo: los pasteles. Recomendamos encarecidamente sus galardonados macarrones.
Ruta clásica - Roja; parada: Trocadéro
carette-paris.fr
ANGELINA PARIS
El que antaño fue el salón favorito de Coco Chanel, Angelina es el retrato de la indulgencia plenaria. El salón de té más conocido de París, con su bello marco de espejos en dorado y obras de arte poéticas. Es ideal para la mayoría de las ocasiones especiales. El chocolate caliente africano resulta divino... ¡Y es tan espeso que no se puede beber sin ayuda de una cuchara!
Ruta clásica - Roja; parada: Louvre-Pont des Arts
angelina-paris.fr
ODETTE PARIS
Conocido por sus delicados choux, Odette es un salón de té tradicional que ofrece un momento de respiro de la visita turística. Modesto desde el exterior, elija un lugar con vistas hacia afuera en el piso superior y disfrute de unas vistas de excepción de Notre Dame, además de degustar los diferentes sabores de sus pasteles en miniatura. Un paraíso.
Ruta clásica - Roja; parada: Notre Dame
odette-paris.com
CAFÉ POUCHKINE
Una combinación única de influencias rusas y francesas, el mundialmente famoso chef pastelero Emmanuel Ryon le llevará en un viaje culinario que dibuja una historia de grandiosidad nostálgica. El ambiente parece sacado de un cuento de hadas y el servicio es maravilloso. Recomendamos encarecidamente el cruasán de vainilla y varias visitas, ya que le costará hacer su elección.
Ruta clásica - Roja; parada: Opéra Garnier
cafe-pouchkine.fr
Una vez que haya pasado por la pastelería perfecta en su itinerario, estará revigorizado y listo para seguir disfrutando de su día por el bello París. O simplemente puede tomarse libre el resto de la tarde y hacer de su día uno muy dulce para el recuerdo...